Economía

Aranceles y la Nueva Estrategia Comercial en EE. UU.

Recientes órdenes ejecutivas han introducido nuevos aranceles a las importaciones desde Canadá, México y China, con el objetivo de frenar el comercio ilícito y la inmigración ilegal. Sin embargo, estas medidas también generan un impacto significativo en la economía global y en el comercio internacional.

¿Cuáles son los nuevos aranceles?

A partir del martes, los aranceles establecidos serán los siguientes:

  • Canadá: 25% sobre importaciones generales y 10% sobre productos energéticos.
  • México: 25% sobre sus exportaciones a EE.UU.
  • China: 10% sobre sus exportaciones a EE.UU.

Estos impuestos recaen sobre los importadores estadounidenses, lo que podría traducirse en mayores costos para empresas y consumidores.

Posibles efectos en la economía

Los aranceles pueden generar varios efectos económicos:

  1. Aumento de costos para empresas y consumidores: Al encarecer las importaciones, es probable que los precios de bienes afectados aumenten en el mercado interno.
  2. Reacciones de Canadá, México y China: Se prevé que estos países impongan aranceles de represalia a productos estadounidenses, lo que podría afectar a exportadores en sectores clave.
  3. Impacto en la inflación y el empleo: Si los costos de producción suben, las empresas pueden reducir inversiones o empleos, afectando el crecimiento económico.

Cambios en la política comercial

Las medidas se basan en la Ley de Poderes Económicos de Emergencia Internacional de 1977, que permite al presidente establecer restricciones comerciales en respuesta a amenazas externas. Además, se ha eliminado la exención “de minimus”, lo que significa que compras internacionales inferiores a $800 también estarán sujetas a impuestos.

¿Qué sigue para la economía?

El futuro de estos aranceles dependerá de las negociaciones y de los efectos que tengan en la economía estadounidense. Si las represalias comerciales afectan sectores estratégicos, es posible que se evalúe su modificación. Por ahora, las empresas deben prepararse para un entorno de costos más elevados y posibles ajustes en las cadenas de suministro.