EconomíaGestión empresarial

Tendencias de la aceleración digital

La transformación digital ha dejado de ser una opción para convertirse en un motor necesario para las empresas. Las nuevas tendencias de la aceleración digital y la elevadísima competencia obligan a evolucionar y adoptar formas de trabajo digitales que busquen la agilidad, la resiliencia y, por supuesto, el crecimiento.

Pero la digitalización de las empresas no está exenta de nuevos desafíos. Como señala el informe ‘La aceleración digital de los negocios’, elaborado por la consultora Chubb en colaboración con Accenture, a medida que las pequeñas y medianas empresas aumentan sus inversiones en el ámbito digital y preparan a su personal, sus operaciones y sus modelos de negocio de cara a la transformación, también pueden ser más vulnerables a riesgos de los que quizás todavía no son conscientes. Como resultado de las más de 1.350 entrevistas a ejecutivos de pymes de 14 sectores en Australia, Brasil, Canadá, Colombia, Francia, México, Reino Unido y Estados Unidos, el informe desgrana cuatro grandes tendencias en el proceso de transformación digital de las pequeñas empresas.

1.- Dominar las comunicaciones digitales

Como apunta el estudio, las experiencias digitales de los clientes son fundamentales para que las empresas sigan siendo competitivas. Asimismo, las expectativas de los clientes respecto a los productos y servicios evolucionan constantemente y están muy influenciadas por sus interacciones con las marcas. Amazon, Apple, Google, entre otras, son la referencia en lo que se refiere a experiencia de usuario y personalización.

En este sentido, el 45% de los encuestados señalan la entrega de productos y servicios a demanda como una de las dos principales prioridades empresariales. La otra prioridad -46%- es la adaptación de productos, servicios y comunicaciones para múltiples generaciones. A pesar de la importancia de las ofertas personalizadas y a demanda, una cuarta parte de las empresas encuestadas no cree que el uso de formas directas de comunicación con los clientes -como las redes sociales o chats en tiempo real- vaya a repercutir en sus resultados.

2.- Aprovechar el poder de los datos

A medida que se hace cada vez más importante recopilar, analizar y utilizar los datos de clientes para optimizar las ventas, las inversiones en datos y tecnología se hacen más esenciales para mantener los planes de crecimiento y diferenciarse de los competidores.

En lo que respecta a usar el poder de los datos, el uso de la nube es la principal prioridad para las empresas a día de hoy. Pero de cara al futuro, la prioridad a tres años para el 75% de las pymes encuestadas es la Inteligencia Artificial (IA) y su implantación en los procesos de la empresa. Sin embargo, solo una quinta parte de las empresas aseguran tener suficientes capacidades internas para implantar la IA, lo que supone el principal reto tecnológico para las pymes.

3.- Apoyar a los empleados

La irrupción de la Covid-19 en nuestras vidas ha provocado que, de la noche a la mañana, las empresas hayan tenido que adaptarse para dar soporte al teletrabajo. En este ámbito, el 84% de las pymes encuestadas por Chubb y Accenture afirma que su rendimiento se ve o puede verse afectado de forma significativa por una necesidad de personal con nuevas capacidades y habilidades tecnológicas. Si al mayor volumen de teletrabajo sumamos las tecnologías de la nube y la IA, la personalización y las nuevas formas de comunicación con el cliente, la necesidad de personal capacitado tecnológicamente seguirá creciendo.

En un entorno tan competitivo, además, contratar y retener a los trabajadores con las habilidades adecuadas también puede convertirse en un reto para las pymes.

4.- Ser un actor principal en el mercado global

Para muchas pymes, seguir creciendo significa buscar mercados más grandes, ya sea expandiéndose a nuevas zonas geográficas o desarrollando asociaciones con los principales actores del mercado digital –como los marketplaces.

En este ámbito, la principal prioridad de las pequeñas y medianas empresas es la de ser capaces de desarrollar oportunidades para colaborar con los grandes actores de las plataformas comerciales y sociales, tanto ahora como a tres años vista. Muchas empresas consideran la expansión virtual como la mejor oportunidad para sobrevivir y crecer. Pero trabajar con plataformas de venta digital puede generar desafíos como la escala, la distribución y la feroz competencia en lo que se refiere a márgenes de beneficio.

En este sentido, los riesgos para terceros, como los relativos a datos, son los mayores retos para aproximadamente el 40% de las pymes encuestadas. Aunque asociarse con grandes plataformas puede facilitar el acceso a otros mercados, solo el 41% de las empresas prioriza actualmente ofrecer productos o servicios en mercados extranjeros.

Fuente original: www.asesoresdepymes.com